Monday, November 21, 2005

Mi Caballero de la AD


Mi Caballero de la AD, ese que me toma de la mano y me invita a visitar, cada día, sitios diferentes de un mundo que no imaginaba conocer, que con sus brazos largos me protege del desconsuelo, la pena y la amargura, regalándome la paciencia de su mirada y la pureza de su palabra.

Aquel que no imagina la fuerza de su corazón, que solo actúa con tesón, guiado siempre por la confianza que le dan sus pasos y por el recuerdo de las palabras de sus antepasados. No ocupa las promesas en su habituar, pues éste, es siempre una promesa ya cumplida; me sorprende cada día, sin saber me guía.

Y sigue su camino, erguido; mira hacia tras solo cuando el momento se lo indica; él no olvida, aunque su memoria suele ser frágil; él no renuncia, siempre camina, y ante todo, quizás sin darse cuenta, él siempre me lleva y me cuida.

Saturday, November 12, 2005

No quiero!!------------¿Y mi próximo sueño?


No quiero que los minutos me quiten lo que quiero, no quiero que la noche se lleve de mis brazos lo que anhelo, no quiero que el día se llene de cosas que no me permitan estar junto a ti. Pero la vida es así y nosotros complementamos el que hacer de la vida, su necesidad de querer lo que no tenemos y cuando lo tenemos, la necesidad de querer tener más.

Y corremos, corremos desesperadamente por alcanzar lo que no tenemos; también paramos, porque son algunos los que hacen esfuerzos por los demás, los otros, solo esperan el minuto de alegría que les traen quienes desean.

Y volamos, volamos en los sueños, deseando encontrarnos con quien no tenemos, abrazarlo, pertenecerle por siempre; así, paran los minutos, se cumplen nuestros sueños. Pero la noche no es tan larga y debemos despertar, entonces todo vuelve a esfumarse y postrados en nuestras camas solo deseamos que el techo de nuestras casas sea parte del sueño que nos acerca a quienes queremos.

Todo es parte de la vida, del círculo de la vida, ese círculo que a veces te enreda y desespera, te pierde y ayuda, te da la mano y te deja sola. Siempre hay minutos de alegría, siempre hay razones de sueños que nos gustaría que fuesen realidad. Espero que el día en que se cumpla mi próximo sueño no tarde en llegar.